Llegó a mis manos el libro de crónicas “Voces valientes”, de la periodista caleña Paola Andrea Gómez, donde encontré 17 historias que tienen en tomas guerrilleras y paramilitares, desplazamientos y abusos sexuales un hilo en común que me recuerda los dolores del país pero que a su vez, me llena de esperanza el alma y me lleva a pensar que no todo está perdido y que por más difícil que sean los momentos de la vida, renacer de los escombros termina siendo un reto posible.
Gómez, quién ha dedicado gran parte de su vida a los temas de paz, género y desarrollo social, en este encantador libro, les dio vida a voces como la de Elena, quién describe – en esta publicación del programa editorial de la biblioteca departamental, – como “la cantadora de paz”, una de las protagonistas de las 149 páginas que nos permite recordar y comprender la historia violenta del conflicto armado del Valle del Cauca.
La voz de Elena Hinestroza deja entrever el coraje, la sensibilidad y la creatividad para afrontar con amor las múltiples dificultades que enmarcaron las primeras décadas del siglo XXI.
Voces valientes me introdujo en el mundo de la resiliencia, de cómo es posible perdonar a quienes tantos dolores puedan haber causado y me transportó a mi infancia donde la música tranquilizaba y sanaba dolores.
Elena, la mujer perseverante que difícilmente dice ´no puedo´, en su natural sabiduría nos resume que “la mejor manera de cómo es que debemos vivir es no guardando rencor porque en su corazón lo que le cabe a ella es alegría”.
Elena, me hizo recordar una frase de la escritora chilena Isabel Allende, “Memoria selectiva para recordar lo bueno, prudencia lógica para no arruinar el presente y optimismo desafiante para encarar el futuro”.
Comments
Fin de los artículos
No hay más artículos para cargar