El debate alrededor del oso de anteojos que fue cazado por un nativo en Aráuca sigue en nuestro portal. Estos son algunos comentarios.

Aquí la noticia debería ser la indignación porque un nativo indígena tenga que llegar a esos extremos para satisfacer su necesidad básica de alimento. Eso si debería causar indignación, pero como la moda es defender a los animales, y no lo digo porque no deba hacerse, sino porque generalmente los impulsores de estos movimientos dejan de lado lo elemental, que entre otras es que la vida de los humanos prima, y más la de los nativos que bien lo leí por acá en otro comentario ha sido bien dura y han sido perseguidos desde sus inicios.

Jorge Gutiérrez

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¿Es una catástrofe que un indígena haya cazado el oso para comer? Pueda que sí, pero si es para comer él y su familia, lo deben judicializar.

Pero no es una catástrofe lo que hacen las multinacionales mineras en el Guajira y en el Cesar, desplazando comunidades enteras para sus proyectos haciendo trasvases de los ríos, para sus proyectos, el acaparamiento de tierras en la altillanura, para el cultivo de palma y caña.

Luis Álvaro Noreña Correa

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