Cali, octubre 7 de 2024. Actualizado: lunes, octubre 7, 2024 18:58
Una polémica acción por parte de un grupo de profesores ha generado revuelo en redes sociales, el incidente ocurrió en una secundaria, donde los docentes destruyeron y quemaron los celulares decomisados a los estudiantes como castigo por el uso excesivo de estos dispositivos durante las clases.
El hecho tuvo lugar en una escuela ubicada en México y de acuerdo con los reportes difundidos en redes sociales, los profesores, con martillo en mano, destruyeron uno por uno los celulares confiscados a los estudiantes.
Tras romper las pantallas y desmantelar los dispositivos, formaron una pila con los teléfonos y procedieron a quemarlos en lo que parecía ser un “acto de enseñanza” para los jóvenes.
Este tipo de medida se implementó en respuesta a la creciente preocupación por el uso excesivo de pantallas en las aulas, que según muchos expertos afecta el desarrollo psicosocial y el rendimiento académico de los estudiantes.
Varias instituciones en México, tanto oficiales como privadas, han comenzado a prohibir el uso de celulares dentro de las instalaciones educativas como parte de una campaña para mejorar la atención y el comportamiento en clase.
A pesar del impacto negativo que esta acción ha causado en redes sociales, la institución educativa afirmó que los padres de los estudiantes habían dado su consentimiento para llevar a cabo esta drástica medida.
Por su parte, la rectora de la escuela, señaló al medio Universal que la destrucción de los celulares formaba parte de un plan acordado con los padres de familia, quienes aprobaron el castigo para reforzar el cumplimiento de las normas escolares.
“Llevamos a cabo la quema y destrucción de artículos decomisados que se encuentran prohibidos en el reglamento escolar, mismos que todos los padres de familia aceptaron y dieron su consentimiento. Iniciamos una semana más de trabajo, les deseo éxito a todos en sus actividades diarias”, afirmó Ortega.
A pesar del respaldo de los padres, la medida ha generado un fuerte rechazo en redes sociales, tanto en México como en otros países de América Latina.
Muchos usuarios consideran que la destrucción de los celulares fue un castigo desproporcionado, argumentando que la situación podría haberse manejado de manera más constructiva, a través de campañas de concientización y una mejor comunicación entre la institución y los estudiantes.
Por otro lado, algunos defendieron la acción como una forma de hacer cumplir las reglas y poner fin a la distracción que generan los dispositivos móviles en el entorno escolar.
El incidente ha abierto un debate sobre cómo las instituciones educativas deben abordar el uso de dispositivos móviles en las aulas.
Si bien muchos consideran que es necesario limitar el uso de celulares en el contexto educativo, la destrucción de estos dispositivos ha provocado una discusión sobre la proporcionalidad de los castigos y la búsqueda de alternativas más equilibradas para promover el respeto a las normas escolares.
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