Cali, diciembre 8 de 2024. Actualizado: sábado, diciembre 7, 2024 00:11
Por más de veinte horas, el corregimiento de Robles estuvo en zozobra luego que un vehículo fuera abandonada en pleno parque principal, cerca a la estación de policía.
La comunidad se mostró alarmada ante la posible amenaza de un carro bomba en el lugar y dio la alerta a las autoridades, que se hicieron presentes en la zona.
La explosión de un carro bomba en zona rural del municipio de Buenos Aires, en el norte del Cauca, mantiene en alerta y tensionada a la región.
La presencia del vehículo desconocido obligó a las autoridades a acordonar la zona y evacuar tanto la estación de policía como la sede de los bomberos.
Así mismo, quince familias debieron ser evacuadas por prevención. Luego de que las autoridades realizaran las respectivas inspecciones y el perro antiexplosivos no detectara nada, se descartó que se tratara de un carro bomba.
Además, se conoció que al parecer se trataba de un carro que había sido hurtado a un ingenio de la región.
Al referirse a esta situación, el alcalde de Jamundí, Andrés Felipe Ramírez, dijo que se iba a “hacer una detonación controlada a la puerta para seguir inspeccionando el vehículo”.
Ramírez indicó que el canino que realizó labores de inspección en el lugar “no reportó explosivos alrededor”.
El mandatario local manifestó que se han dispuesto las capacidades tanto del Ejército como de la Policía y de la Secretaría de Gobierno, para prevenir cualquier situación que pueda repeler el orden público en el territorio.
En ese sentido afirmó que “nos mantenemos alertas” e hizo un llamado a la ciudadanía de denunciar cualquier situación sospechosa que se presente.
Además, hizo un llamado al Gobierno Nacional a que se extremen las medidas de seguridad y a que la fuerza pública haga control territorial en el municipio.
Por otra parte, la comunidad docente de Jamundí marchó este jueves por las principales calles de esta localidad, para rechazar la muerte de la profesora víctima del atentado ocurrido en el corregimiento de Timba, en el Cauca.
Durante la movilización, los maestros portaban una pancarta en la que se leía “Los maestros educamos para la paz”.
La docente, quien trabajaba en una institución educativa de la vereda Naranjal, en Timba, era docente desde hace 37 años.
Ella y la otra víctima de la explosión eran oriundos de Jamundí y serán sepultados en esta localidad.
Los docentes reclamaron a los violentos dejar por fuera del conflicto armado a la población civil.
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