Hoy se cumple el segundo día consecutivo de paro en la Universidad del Valle, Univalle, debido al feminicidio de Sirley Vanessa López, una estudiante de la sede Palmira que fue asesinada el 12 de mayo tras ser atacada con un arma de fuego por un hombre que ingresó al campus universitario.

En el mismo hecho, otra estudiante resultó herida y se encuentra actualmente con pronóstico reservado.

La tragedia generó una fuerte reacción dentro de la comunidad universitaria, que convocó a protestas y bloqueos de vías en demanda de justicia y mejores condiciones de seguridad.

Reacciones y exigencias

La noticia del feminicidio de Sirley Vanessa López sacudió a la comunidad educativa de Univalle.

Estudiantes y docentes se manifestaron a través de protestas que incluyen bloqueos en las cercanías de la universidad y actos vandálicos en la sede Meléndez.

También se realizaron velatones en memoria de la joven fallecida, donde se reunieron miembros de la comunidad universitaria y ciudadanos en general.

Las demandas principales incluyen justicia para la víctima y una mejora en la seguridad dentro del campus.

Además de exigir que se esclarezca el crimen, los estudiantes piden políticas más efectivas para prevenir la violencia de género en el entorno universitario.

Insisten en la necesidad de acciones concretas para garantizar la seguridad de los miembros de la comunidad educativa.

Las medidas solicitadas incluyen un mayor control de acceso a los campus, el aumento de la vigilancia y la implementación de protocolos más estrictos para la atención a víctimas de violencia.

La universidad, por su parte, ha expresado su solidaridad con las víctimas y ha activado equipos de apoyo psicológico y social para acompañar a las familias afectadas.

También recordó que cuenta con protocolos y capacitaciones dirigidas a eliminar las violencias basadas en género.

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