El nivel del río Cauca presentó un descenso en las últimas horas, pasando de 9.93 metros a 9.64 metros.

Aunque esta reducción de 30 centímetros disminuyó parcialmente el impacto de inundaciones, la alerta naranja se mantiene debido a la posibilidad de cambios repentinos en el caudal.

Este comportamiento del río está relacionado con la reducción de lluvias en el norte del Cauca y la estabilización de los afluentes en la cuenca baja.

Sin embargo, las autoridades reiteraron la importancia de seguir en alerta y monitorear constantemente la situación para prevenir nuevos riesgos.

135 hogares afectados y atención prioritaria

Las inundaciones afectaron a 135 familias en distintos sectores cercanos al río Cauca.

Playa Renaciente es la zona más impactada, con 97 hogares damnificados.

En Brisas del Cauca, 17 familias resultaron afectadas, mientras que en Puerto Nuevo y el corregimiento de Navarro se reportan 15 y 6 viviendas perjudicadas, respectivamente.

Ante esta situación, la administración local desplegó ayudas humanitarias para apoyar a las familias afectadas.

Se entregaron insumos esenciales como alimentos, kits de aseo y colchones.

Además, se mantiene comunicación constante con las comunidades para evaluar nuevas necesidades y coordinar acciones de mitigación.

El impacto de la emergencia ha requerido más de 100 horas de monitoreo continuo por parte del Sistema Distrital de Gestión del Riesgo.

Durante este tiempo, se trabajó en la identificación de puntos críticos y en estrategias para reducir posibles afectaciones en caso de que el nivel del río vuelva a subir.

Monitoreo permanente y medidas de prevención

A pesar del descenso en el nivel del agua, las autoridades son enfáticas en que la alerta naranja sigue vigente.

Esto significa que el monitoreo del río Cauca y sus afluentes se mantiene de manera constante para detectar cualquier variación que pueda representar una amenaza para las comunidades cercanas.

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