La gobernadora del Valle del Cauca, Dilian Francisca Toro, y el alcalde de Cali, Alejandro Eder, que acaban de ser calificados con una aprobación del 53%, cada uno, en el Panel de Opinión –realizado por la firma Cifras y Conceptos- reciben aplausos por parte de diversos sectores gremiales, académicos, sociales y políticos a raíz del éxito de la COP16.
Si bien la COP es una cumbre de la ONU y el organizador es el país anfitrión –por lo tanto, el gobierno nacional-, el fenómeno que se vivió en las calles de Cali se dio, en gran medida, gracias a las administraciones de Toro y Eder.
Sin desconocer la trascendencia global de lo discutido por los representantes de los gobiernos de los 190 países que se congregaron en la Zona Azul –en el Centro de Eventos Valle del Pacífico- para tomar decisiones sobre la protección de la biodiversidad mundial, lo que ocurrió en la Zona Verde y en los diferentes espacios de la ciudad en donde se realizaron actividades relacionadas con la cumbre tiene una trascendencia local y regional invaluable, porque la masiva respuesta demuestra que se logró no sólo involucrar a los caleños con la COP16, sino también emocionarlos y llevarlos a vivir la ciudad de otra manera.
En ese sentido, las actividades realizadas en el Bulevar del Río y el de Oriente, en la Plaza de Cayzedo, en la Plazoleta de San Francisco, en Yawa, en la Unidad Deportiva Alberto Galindo y en la Biblioteca Departamental, organizados unos por la Alcaldía de Cali y otros por la Gobernación del Valle, fueron los espacios en los que se vivió la COP de la gente.
Y la gobernadora y el alcalde, juntos en una y otra actividad, y también haciendo anuncios relacionados con temas de biodiversidad y medio ambiente para Cali y el Valle, transmitieron no sólo un mensaje de unidad, sino también de coordinación y una muestra de capacidad de hacer.
Y es que, a diferencia de varios personajes que trataron de ganar indulgencias con padrenuestros ajenos, en busca de figuración durante la COP16, Dilian Francisca Toro y Alejandro Eder la trabajaron, pero no sólo durante los 12 días de duración, sino que los caleños los vieron realizando gestiones desde mucho antes para asegurar las condiciones que garantizaran que la cumbre fuera el éxito que terminó siendo.
Por eso la gobernadora y el alcalde se llevan los aplausos.
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