Cali, febrero 11 de 2025. Actualizado: lunes, febrero 10, 2025 23:25
Preocupante resulta la propuesta de incorporar guerrilleros a las Fuerzas Militares hecha por el alcalde de Bogotá, Gustavo Petro. La idea es tan descabellada que el presidente Juan Manuel Santos tuvo que salir rápidamente a descartarla.
Sin embargo, el planteamiento del Alcalde genera preocupación, pues ahora el mandatario capitalino es aliado político del Presidente de la República y de una u otra forma el respaldo de Progresistas (movimiento político de Petro) a la reelección tiene un fondo programático, y los petristas, de ser reelegido Santos, buscarán que su ideología se incorpore de alguna manera al Gobierno Nacional.
Por lo tanto, el Jefe de Estado debe ser más preciso en este tema y garantizarle al país que semejante exabrupto no prosperará.
En medio de la desmotivación que viven las Fuerzas Militares resulta grosero, por decir lo menos, una propuesta que pone a los soldados al nivel de los guerrilleros, que equipara a los oficiales con los cabecillas subversivos.
Con todos los esfuerzos que se hacen para depurar a las Fuerzas Militares y a la Policía de malos elementos, sería absurdo que el Estado decidiera llenar los cuarteles con extorsionistas, secuestradores, terroristas y narcotraficantes y entregarles armas y mando.
Es claro que si se llega a un acuerdo con la guerrilla se debe buscar en qué ocupar a los combatientes que eventualmente se desmovilicen, pero no puede ser a costa de perder todo lo ganado en la profesionalización de las Fuerzas Militares.
Por propuestas tan inconvenientes como ésta es que se hace necesario que haya mayor claridad de lo que negocian el Gobierno y las Farc en Cuba, que se conozcan detalles de los términos, para evitar que el país se lleve sorpresas más adelante y para que los ciudadanos tengan la confianza de que los diálogos son un avance y no un retroceso.
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