¿Qué tan sismorresistente es una ciudad que ha crecido de manera irregular?

Si bien hay que destacar el simulacro nacional realizado esta semana para medir la capacidad de reacción ante un sismo de gran magnitud y revisar los planes de evacuación, es necesario pedir medidas de fondo que corrijan riesgos estructurales que aumentan la vulnerabilidad de los centros urbanos ante un fuerte movimiento telúrico.

En el caso de Cali, por ejemplo, la forma irregular en la que ha crecido la ciudad representa una amenaza, no solo en los sectores que surgieron a partir de la invasión de tierras en las laderas y en el extremo oriente, sino también en barrios populares y de clase media que han crecido hacia arriba sin los requisitos necesarios para la edificación en altura.

Cali está llena de casas que eran de una planta y en la última década crecieron hacia arriba y hoy tienen tres y hasta cuatro pisos, ¿las nuevas plantas se edificaron con todas las medidas de sismorresistencia?

Si se tiene en cuenta que Cali se encuentra sobre el Cinturón de Fuego del Pacífico, una zona sísmica de mediano y alto riesgo, se entiende que Cali requiere una revisión estructural.

Preparar a la gente para que sepa cómo reaccionar ante un sismo de grandes proporciones es muy importante, pero igual o más importante es asegurarse de que la ciudad no sea una trampa mortal.

Ahora bien, sobre los planes de evacuación, es necesario que simulacros futuros vayan más allá de las edificaciones públicas y de puntos de alta concentración, pues se debe pensar cómo involucrar y/o informar a quienes no están en estos sitios, pero que pueden jugar papeles claves a la hora de evacuar sus viviendas, las de sus vecinos o sus lugares de trabajo. Todo lo que se haga al respecto siempre será útil.

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