Telecomunicaciones no es competitivo y por lo tanto no es rentable.

Sacar adelante Emcali debe ser un propósito del último año del alcalde Armitage. La Empresa no puede seguir siendo un pendiente histórico de la ciudad.

Emcali no requiere más estudios ni dilaciones. Hace muchos años los gerentes y los alcaldes saben lo que pasa y no han hecho lo necesario para devolverle la eficiencia y rentabilidad propias de su industria.

Las razones de la falta de acción han sido políticas, porque lo cierto es que los verdaderos dueños de Emcali son los sindicatos y los fortines políticos a quienes no les importa la ineficiencia y les convienen las prevendas.

Financieramente hablando, los números no mienten porque el mercado no es condescendiente.

El componente de Telecomunicaciones no es competitivo y por lo tanto no es rentable. Las pérdidas de esta área desangran las áreas de energía y acueducto.

Lo triste es que eso está generando que la empresa no pueda hacer las inversiones que requiere en estas dos áreas.

¿Por qué no se ha liquidado este negocio? Por los intereses internos de los funcionarios. Lo que debemos tener claro los caleños es que esto nos afecta a todos pues al no tener una empresa competitiva, la calidad del servicio se deteriora y el costo aumenta.    

¿Estamos dispuestos los 450.000 usuarios de Emcali a seguir pagando tarifas más altas en acueducto y energía para sostener las pérdidas de Telecomunicaciones? ¿Es justo que no haya recursos para invertir en el futuro abastecimiento de agua por el mismo motivo? ¿Vale la pena perder competitividad en energía por defender lo ya insalvable? Hace muchos años a Emcali la dejó el tren en materia de telecomunicaciones, ¿vamos a esperar a que pase lo mismo con energía y acueducto por no tomar las decisiones que se requieren?    

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