Cali, junio 2 de 2023. Actualizado: viernes, junio 2, 2023 16:17
La semana pasada el alcalde anunció el aplazamiento de los operativos para sacar de circulación los buses colectivos que le hacen competencia al MIO. Los controles no se retomarán hasta que los operadores del sistema no garanticen la operación de la flota completa.
Sin duda, el paralelismo de los sistemas genera una disminución de los pasajeros en el MIO, situación que afecta los ingresos de los operadores. Sin embargo, también es evidente la crisis de movilidad que se generó con la cancelación de rutas sin que hubiese buses suficientes para atender la demanda. La situación actual es crítica. La congestión en los buses es insoportable y la demora en los tiempos de desplazamiento va en aumento. En la actual situación era impensable sacar nuevos vehículos. El MIO es un modelo que a todas luces le sirve a la ciudad pero hay que desarrollarlo buscando la armonía entre rentabilidad y servicio. Resulta triste analizar las cifras del Cali como Vamos en los que se refiere al sistema. Entre el 2011 y el 2013 el porcentaje de caleños insatisfechos con el transporte en la ciudad pasó de 17 al 52%; el 41% de los encuestados considera que su calidad de vida empeoró con el MIO y el 46% de los usuarios piensa que el servicio antiguo era mejor que el nuevo sistema. El estudio arroja sistemáticamente que la tardanza en frecuencia y la congestión en los buses son los principales problemas del sistema.
El transporte es un tema sensible para todos los habitantes de la ciudad, en el 2014 debe emprenderse toda una cruzada política, administrativa y financiera para poner el MIO sobre ruedas. No hacerlo está impulsando en la ciudad la piratería y el mototaxismo, dos alternativas que ponen en peligro la seguridad de los ciudadanos y amenazan aun más la sostenibilidad del MIO.
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Una publicación diaria del Nuevo Diario Occidente S.A. Fundado el 19 de noviembre de 1961
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