¿Salas en vía de extinción?

José David Solís Noguera

Cerca de 15 salas independientes de Teatro de Cali con toda su cadena de valor para el desarrollo de las artes dramáticas y escénicas se encuentran en crisis y en peligro de extinción por cuenta de los recortes en el presupuesto para la cultura y el estancamiento de los desembolsos de los dineros correspondientes al programa de salas concertadas y de la Ley de Espectáculos.

Cali, – gracias a sus artistas, – es una ciudad que se ha caracterizado en el ámbito nacional por liderar procesos exitosos de formación de públicos, de creación, de actividades pedagógicas, de circulación, investigación artística, de gestión y organización, y por eso resulta preocupante que la Secretaría de Cultura del municipio esté dejando solas a las Salas Concertadas, atentando contra las manifestaciones y expresiones de quienes permiten generar patrimonio artístico para la ciudad.

Por años, teatros como la Máscara, Esquina Latina, Salamadra, Domus, El Telón, La Concha, Casa Naranja, El TEC, entre otros, han puesto a soñar y a imaginar a miles de personas con sus puestas en escena y sus procesos sociales y artísticos en las diferentes comunas y corregimientos de Cali. Las sistemáticas dilaciones y dificultades que deben afrontar los templos del teatro para contratar recursos de cofinanciación, está dejando a una ciudad sin oferta teatral y sin espacios de cultura y entretenimiento.

Resulta contradictorio que Cali haya sido galardonada internacionalmente como el destino cultural más importante de América Latina, cuando nuestros teatros libran una batalla titánica contra la falta de políticas públicas para el desarrollo, protección y apoyo a las Salas Concertadas. Nuestros Teatros necesitan de la solidaridad de los caleños.