Inició su gestión el 1 de enero de 2024.
Desde allí se señala un indicador importante en el cambio de gestión de lo público y en el sentir ciudadano de la gobernanza.
Alejandro Eder, quien proviene, inicialmente del sector empresarial, y con experiencia en el sector público en cargos de relevancia nacional e internacional, ha demostrado lo vital que es para la economía de una sociedad, ser aliado del sector productivo.
En esa brega ha logrado con empresarios de la comarca posibilitar que se vuelva a creer en lo público.
Y conjuntamente con la gobernadora Dilian, miran hacia un objetico común sin perder su autonomía: recuperar a Cali y el Valle del Cauca.
Alejandro Eder ha sabido edificar sobre los cimientos dejados por varias administraciones anteriores, y asume con carácter los compromisos que debe ejecutar durante su período que quedaron consignados en el plan de desarrollo titulado: “Cali capital pacífica de Colombia”, dejando claro su impronta con la reconciliación de la ciudad.
El alcalde se ve en los barrios escuchando a los líderes, tomando nota, llamando la atención del funcionario que no ha ejecutado algún proyecto, de tal modo que como líder de la ciudad evidencia su gestión en equipo y quiere resultados para el beneficio social.
Un año de gobierno que ha sido ejercido con madurez, a la altura de lo prometido en campaña, con tonalidades fuertes y algunas bajas pero que como en la música, son parte del compás que se registra y es lo que en toda una partitura hace una sinfonía.
La ciudadanía debe hacer su parte, ante todo en el tema de cultura ciudadana, en el manejo de residuos y en la tolerancia.
Que es parte de la integralidad que se pide en sociedad, para que Cali siga siendo la ciudad cívica por excelencia.
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