Edwin Alberto Arce Córdoba, abogado de 34 años, residente del barrio Bochalema, en la comuna 22 de Cali, dedicó los últimos 4 años a su labor como líder social en diferentes zonas de la ciudad.

Su historia de vida está marcada por una vocación temprana de ayuda al prójimo, inculcada desde su infancia por su entorno familiar y amplificada por la iniciativa de amigos cercanos.

Su trayectoria como líder comunitario se remonta a sus años de colegio, donde comenzó a tomar acciones concretas para impactar positivamente en su entorno.

Desde entonces, cultivo una visión madura y una experiencia significativa en liderazgo social, enfocada en generar impactos comunitarios y sociales que beneficien a su comunidad.

Motivado por la oportunidad de representar a sus compañeros de colegio, Arce descubrió su pasión por el liderazgo comunitario.

Para él, la capacidad de trabajar en equipo para buscar el bien común es una de las experiencias más enriquecedoras y gratificantes de su labor.

“Si bien, el liderazgo es algo que tiene toda persona como esencia, esta virtud o estilo de vida, lo descubrí en la época de colegio, puesto que tener la oportunidad de representar a un grupo estudiantil, llevando acciones de impacto social, como lo es sembrar un árbol, pintar un parque, ayudar a construir un mejor bienestar estudiantil, son acciones de vida que permiten fortalecer esa ideología en el ámbito social, más aún, cuando esa intervención se convierte en un aporte social, que permite buscar un bien común a través del trabajo mancomunado en equipo”, afirmó Arce

Lo más gratificante para Arce es observar cómo las acciones que emprenden como líderes sociales provocan un cambio positivo en la vida de las personas y las familias que participan en sus proyectos. Desde su perspectiva, cada pequeño avance contribuye a la construcción de una sociedad mejor.

Sin embargo, la labor de un líder comunitario no está exenta de desafíos. Arce enfrenta obstáculos constantes, desde la resistencia a las iniciativas de cambio hasta la búsqueda de recursos para financiar y sostener sus proyectos a largo plazo.

Uno de los mayores retos es lograr la participación y el sentido de pertenencia de toda la comunidad en las iniciativas que promueven, pues entiende que el éxito de cualquier esfuerzo comunitario depende de la apropiación y el compromiso de quienes forman parte de ella.

“Bajo el entendido de la labor social y comunitaria, se tiene como eje principal que el bien común debe de prevalecer por encima del bien particular, y que gracias a esto, te enfrentes a distintos desafíos, puesto que el hacer acciones que generen cambios, siempre tendrá un porcentaje de resistencia frente a cada iniciativa que se quiera realizar en pro de una comunidad”, afirmó Arce.

Proyecto Giro 360

“A lo largo del tiempo, el proyecto social y comunal, ha evolucionado y se ha transformado de manera positiva, y gracias a esto, soy fundador de la fundación sinónimo de lucro “Fundación construyendo Proyectos”, que por medio de ella, se ha logrado estructurar de manera más solidad cada acción realizada, implementando cambios y mejorando la forma de implementar las actividades que se realizan. En ese sentido, hoy estamos impulsando el proyecto Giro 360”, afirmó Arce

El proyecto ‘Giro 360’ surgió como una respuesta integral a las necesidades sociales y comunitarias, con el propósito de promover el desarrollo integral de la población y mejorar la calidad de vida en diversos aspectos.

Con una ejecución de 2 años, este proyecto se convirtió en sinónimo de esperanza y cambio en la comunidad, abordando una amplia gama de iniciativas que van desde la promoción del autocuidado hasta la creación de espacios inclusivos y sostenibles.

“Al adoptar un enfoque de Giro 360 se busca comprender las causas, efectos e implicaciones de un problema social y así poder tener una visión completa, inclusiva y multidimensional sobre como mitigar este tipo de problemática”, aseguró Arce

El objetivo central del proyecto es claro: mediante soluciones integrales y un enfoque integral, se busca contribuir al bienestar físico, emocional y social de la comunidad.

En un mundo donde las necesidades son diversas y complejas, ‘Giro 360’ se posiciona como un agente de cambio comprometido con el desarrollo integral de sus miembros.

Dirigido a toda la comunidad, desde niños hasta adultos mayores, pasando por madres cabeza de familia y grupos con enfoque diferencial, el proyecto busca ser inclusivo y equitativo en su alcance.

Reconociendo la diversidad de necesidades y realidades dentro de la comunidad, se diseñaron actividades específicas que abordan una amplia gama de temas sociales y comunitarios.

Las actividades llevadas a cabo en el marco del proyecto son diversas y dinámicas. Desde eventos culturales y lúdicos hasta jornadas de embellecimiento de espacios públicos, cada uno tiene como objetivo generar un impacto positivo y tangible en la comunidad.

El cine al barrio, los torneos deportivos, las caminatas ecológicas y los bingos familiares son solo algunas de las iniciativas que forman parte del amplio abanico de actividades ofrecidas en este proyecto.

Sin embargo, más allá de la diversidad de actividades,’Giro 360’ tiene un enfoque claro en la promoción del autocuidado y la salud mental.

Reconociendo la importancia de cuidar tanto el cuerpo como la mente, se implementan estrategias que fomentan hábitos saludables y promueven el bienestar emocional en la comunidad.

Uno de los principales desafíos que enfrenta el proyecto es la falta de recursos financieros. A pesar del compromiso y la dedicación de los voluntarios y líderes comunitarios involucrados en el proyecto, la falta de fondos puede limitar el alcance y la efectividad de las actividades.

Por lo tanto, contar con el apoyo de aliados en el ámbito público y privado es crucial para garantizar la continuidad y el crecimiento del proyecto a largo plazo.

En términos de impacto, ‘Giro 360’ aspira a ser mucho más que un conjunto de actividades aisladas. Busca ser un catalizador de cambios significativos en la comunidad, fortaleciendo el tejido social y empoderando a los miembros de la comunidad para convertirse en agentes de cambio en sus propios entornos.

A través de la colaboración y la solidaridad, se busca construir redes comunitarias sólidas que perduren en el tiempo y continúen generando impacto positivo en la sociedad.

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