América en los cuadrangulares

José Alberto Ortiz, Radio Caracol

Esperar que un equipo cambie su estilo de juego de la fase clasificatoria a una más importante como los cuadrangulares es poco probable.

Y aquí es bueno aclarar que una cosa es la campaña, donde se miden resultados y otra cosa es cómo juega el equipo. Si es efectivo en tareas defensivas y ofensivas, si estéticamente es agradable, si hace control de la pelota,  si juega en corto o en largo, si emplea el \”pelotazo\” para atacar, etc, porque a veces jugando bien no se gana.

Y si hablamos de campañas, aparte de las frías estadísticas, debemos analizar cómo se lograron esos números o qué dificultades se tuvieron para que no fuesen mejores.

En el caso del América, hay que partir de la base que fue muy difícil para el  técnico estabilizar una nómina tipo en la fase de todos contra todos.

Las lesiones, suspensiones,  y hasta el bajo rendimiento, lo impidieron y esto redundó en el rendimiento que fue bueno pero irregular.  Preocupa  la inseguridad de todas las parejas de defensores centrales que ha utilizado Eduardo Lara y la falta de fútbol elaborado.

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