En un giro inesperado, la Corte Suprema de Justicia de Colombia ordenó la suspensión del juicio en contra del expresidente Álvaro Uribe Vélez, debido a una recusación presentada por su defensa contra la jueza Sandra Liliana Heredia.

Esta decisión se produjo en medio de una audiencia del juicio oral por presunta manipulación de testigos y fraude procesal.

Como se recordará, el juicio contra Álvaro Uribe ha sido uno de los casos más destacados en la escena judicial colombiana en los últimos años.

La defensa del expresidente, liderada por el abogado Jaime Granados, presentó una recusación contra la jueza Sandra Liliana Heredia, alegando supuestas vulneraciones al debido proceso y a los derechos del exmandatario.

La Corte Suprema revocó una decisión previa del Tribunal Superior de Bogotá que había negado la tutela interpuesta por la defensa de Uribe, argumentando que la jueza no tramitó adecuadamente la recusación.

La jueza Heredia se enteró de la decisión durante una audiencia y explicó que la Corte Suprema ordenó dar trámite a la recusación en un plazo de 48 horas.

Esto significa que el proceso penal quedará suspendido hasta que se resuelva el incidente de recusación, según lo establecido en el Código de Procedimiento Penal.

Implicaciones

La decisión de la Corte Suprema tiene implicaciones significativas para el caso.

La Sala Penal del alto tribunal destacó que la jueza Heredia no justificó adecuadamente por qué consideró la recusación como una maniobra dilatoria, lo cual es un error según la ley.

Además, la Corte enfatizó que no es procedente que el juez recusado decida sobre su propia recusación, ya que esto podría comprometer su imparcialidad.

La defensa de Uribe solicitó que se anulara todo lo adelantado en el proceso desde el 10 de febrero, pero la Corte Suprema decidió que la invalidación del proceso penal no es una consecuencia directa del amparo concedido.

Por lo tanto, el proceso quedará suspendido hasta que se resuelva la recusación.

En los próximos días, la jueza Sandra Liliana Heredia deberá remitir la recusación a otro juez penal de Bogotá, quien deberá resolver si procede o no la recusación en un plazo máximo de tres días.

Hasta que esto no ocurra, el juicio contra Álvaro Uribe permanecerá suspendido.

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