Cali, mayo 19 de 2025. Actualizado: domingo, mayo 18, 2025 23:18
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Por: Alexandra Delgado
En las montañas del Eje Cafetero colombiano, Manizales se erige como un destino turístico que sorprende por su diversidad y encanto.
Desde su rica herencia cultural hasta su espíritu aventurero, esta ciudad es una joya que ofrece experiencias únicas para viajeros de todos los gustos.
Juan Diego Giraldo, operador turístico y líder de Kumanday Adventures, resume la esencia de la ciudad con pasión: “Manizales es joven, pero tiene mucha alma. Se forjó en las montañas con carácter y espíritu pionero. Nos atrevemos a hacer cosas diferentes, y eso se refleja en nuestra cultura y en nuestra apuesta por el turismo”.
Reconocida como la “capital cultural del paisaje cultural cafetero”, Manizales ha hecho de la cultura uno de sus pilares fundamentales.
La ciudad no solo alberga importantes eventos como el Festival Internacional de Teatro, sino que también ha sabido preservar su patrimonio en espacios emblemáticos como el centro histórico y la Catedral Basílica.
Giraldo destaca cómo Manizales integra lo cultural en sus experiencias turísticas.
“Aquí puedes caminar por el corredor polaco, admirar la arquitectura de nuestra ciudad y terminar en el mirador de Chipre, disfrutando de una vista impresionante de los Andes. Todo esto está acompañado por una calidez humana que te hace sentir como en casa”.
Para quienes buscan experiencias llenas de adrenalina, Manizales no decepciona.
Una de las actividades más emocionantes es el descenso en bicicleta desde el Nevado del Ruiz.
“Es un plan espectacular. Empiezas a 4.400 metros sobre el nivel del mar, recorres paisajes que van desde el páramo hasta bosques de niebla, y terminas en una finca cafetera a 1.400 metros. Es una manera única de conectarte con la naturaleza y la cultura local”, explica Giraldo.
Otra opción para los amantes de la aventura es explorar el volcán Cerro Bravo.
Aunque está en el límite entre Caldas y Tolima, es un destino imperdible para quienes desean caminar por un páramo virgen y llegar hasta los 4.050 metros de altura.
“Es una caminata que se puede hacer en cinco horas, y el paisaje es simplemente espectacular. Es perfecto para quienes buscan un contacto profundo con la montaña”, añade.
Manizales también cautiva con su autenticidad. A pocos kilómetros de la ciudad, pequeñas fincas cafeteras ofrecen a los visitantes una inmersión total en la vida rural.
“Estas experiencias son únicas porque no solo aprendes sobre el café, sino que compartes un día con una familia local. Ellos te enseñan su forma de vida, te invitan a cocinar con ellos y te muestran su bosque privado. Es una experiencia íntima y profundamente enriquecedora”, dice Giraldo.
Manizales es un lugar que logra combinar lo mejor de todos los mundos.
Para los amantes de la vida nocturna, la ciudad cuenta con una vibrante oferta de bares y discotecas.
Desde íntimos clubes de jazz hasta lugares donde se baila salsa y música electrónica, hay algo para cada estilo.
En cuanto a la gastronomía, la ciudad ha experimentado un auge en la última década.
“Manizales ha crecido mucho en términos de oferta gastronómica. Ahora puedes encontrar desde comida tradicional hasta propuestas más contemporáneas y sofisticadas. Es el complemento perfecto para quienes buscan una experiencia integral”, comenta Giraldo.
El turismo sostenible es una apuesta central para la región.
Según Giraldo, cada experiencia busca integrar a las comunidades locales.
“No solo visitamos los lugares, los vivimos con la gente que los habita. Desde la planeación hasta la ejecución, trabajamos con las comunidades locales, asegurándonos de que el turismo sea una herramienta de desarrollo y no una amenaza”, afirma.
Manizales ofrece una mezcla de opciones que la hacen perfecta para cualquier tipo de viajero.
Sus montañas, su cultura, su gente y su gastronomía conforman un destino que sorprende y enamora.
Ya sea que busques adrenalina, tranquilidad o un acercamiento cultural, Manizales tiene algo especial para ti.
Amantes de la aventura: Nevados, volcanes y actividades al aire libre.
Fanáticos de la cultura: Festivales, historia y música tradicional.
Gastrónomos y noctámbulos: Una creciente oferta de restaurantes y lugares para disfrutar de jazz, discotecas y rumba tradicional.
“Manizales puede adaptarse a cualquier tipo de turista. La clave está en armar el plan adecuado que combine sus intereses con las múltiples opciones que la ciudad ofrece,” concluye Giraldo.
Manizales te espera con los brazos abiertos y un sinfín de posibilidades para vivir una experiencia inolvidable.
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Una publicación diaria del Nuevo Diario Occidente S.A. Fundado el 19 de noviembre de 1961
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