Ser líderes comunales en un país como Colombia es una labor que no cualquiera hace, requiere ciertas cualidades para promover actividades en pro de su comunidad y también capacidades como entereza y convicción para afrontar los obstáculos y crisis que se generan en el camino. Es una labor de amores y odios, gratificante e ingrata.
Hablamos con los ediles de algunas comunas de Cali, quienes explicaron cómo es su labor y su relación entre comunidad y autoridades.

La primera en hablar fue Sandra Zarife Halaby, edil de la comuna 6, contando sobre la labor titánica que cumplen tratando lo más posible de atender a toda la población, gestionando recursos con empresas, negocios y personas menos afectadas que se solidarizan con los más vulnerables. Dice además que este período en particular está marcado por grandes retos a los que pueden ser inferiores.

“En mi caso fue una dura experiencia por estar expuesta al contagio, pero me siento satisfecha por el deber cumplido y sigo en la lucha asumiendo el compromiso, porque cada habitante de mi comuna lo vale. Amo profundamente a las personas y por eso trabajo por ellos y para ellos con gusto, estoy segura que la gran mayoría de mis compañeros ediles comparten mi sentir”, afirma la lideresa.

En la comuna 2, expuso la edil Darschan Ocampo que por tratarse de una comuna extensa y multiestrato se presentan diferentes problemáticas a las que les buscan soluciones oportunas y eficientes de la mano de la Administración Municipal, en cabeza del director del CALI 2, pensando siempre en el bienestar de los casi 120.000 habitantes. 

Ocampo agregó que “en estos primeros seis meses y a raíz de la pandemia el trabajo comunitario ha resaltado nuestras funciones, hemos conseguido donaciones no solo para nuestra comunidad sino también para la policía metropolitana, agentes de tránsito y policía militar, así como también iniciaremos próximamente las ollas comunitarias”.

Según Carolina Ordoñez Cedeño, edil de la comuna 17, ha sido algo de mucha paciencia, aprendizaje, también de formación del carácter porque he conocido que falta la cultura del buen trato hacia el funcionario público, sin embargo una aprende a manejar esas situaciones, todo con humildad y enseñanza. “Han sido muy amables los gestores de las diferentes dependencias, de la Policía, de Emcali, de la Secretaría de Seguridad y Justicia, de Movilidad, nos han colaborado muchísimo, hay otras cosas que faltan porque tristemente los ediles trabajamos con las uñas, pero esperamos que las cosas se solucionen, aquí estamos para escuchar y ser escuchados y cambiar las situaciones y mejorarlas para el bien de todos”, indicó la mujer.

Diana Montoya, edil de la comuna 10, se refirió al apoyo que han recibido por parte de algunos sectores y otros de lo que no porque corresponden a intereses privados de algunos líderes, “entonces no podemos generalizar que tengamos un trabajo que se ajuste a toda la comunidad. Sin embargo, los ediles tenemos un compromiso social donde no sólo somos garantes de la participación ciudadana sino que también velamos para que la ciudadanía pueda acceder a algunos programas, planes y proyectos que tengamos en el territorio”, dijo.

Según la lideresa, a pesar de cierta oposición, hay que seguir luchando y buscando soluciones a problemáticas, como las ollas comunitaria, los alimentos y algunas pocas ayudas, “pero lo hemos hecho con la plena intención y la plena convicción de que nuestro trabajo no va a ser remunerado pero sí reconocido por las mismas poblaciones vulnerables que nunca se han visto beneficiadas de ningún tipo de alternativa de salir adelante”, aseguró Montoya.

Similar opina Dora Elena Gil, edil de la comuna 21, quien destaca que su trabajo no es ser veedores, sino que son las personas encargadas de que los proyectos sean transparentes, de hacer control, que sea todo como debe de ser, “nuestro lema es control y vigilancia para que todas las cosas se ejecute en bien de nuestra comunidad, que los dineros se inviertan, nuestro trabajo es a honores, nosotros no ganamos un sueldo hasta que Cali no sea distrito especial, ojalá se toque el corazón el Alcalde y haga este proceso rápido para que nos ayude a los ediles, porque nosotros pasamos dificultades como todo ciudadano, porque nuestro trabajo es liderar de forma gratuita, con el corazón, con el amor que tenemos a nuestra gente, porque nos gusta ayudarlas”, sostuvo.

Sin embargo, hay otros líderes que enfrentan situaciones más complejas, es el caso de Paola Andrea Villanueva, líder habitante del barrio Antonio Nariño, en la comuna 16, representante de 35 mil familias de Bienestar social en Familias en Acción y la delegada de los herreros, quien dice lleva más de siete años poniendo la vida día y noche por su comunidad y por su pueblo.

“Yo nací acá en Antonio Nariño, somos ocho barrios y de la calle 42 hacia acá parecemos un asentamiento, no hay una equidad, no hay oportunidades, yo veo que llegan proyectos pero no hacia acá. Soy una persona que da la cara en un sitio muy vulnerable, en zona roja y he hecho muchas denuncias por irregularidades, esto es una bomba de tiempo. Soy de los herreros y carretilleros pioneros, amo mi territorio y yo siento que si me retiro de esta labor voy a dejar todo desamparado y no va a haber quién luche, porque llegan ataques de otros líderes, incluso, amenazas de las autoridades. Se siente uno muy solo en la comuna”, manifestó la lideresa.

Zona rural

Juan Carlos Montenegro, edil corregimiento de Pance
Ya ha pasado casi tres meses de esta pandemia en los que se ha gestionado para que haya un medio de transporte y un puesto de salud. Hubo conflictos con algunas personas que lastimosamente atacaron mucho a los líderes, acusándonos de robos de mercados, de ayudar a los que están entre la rosca, gente muy grosera, donde hubo también amenazas de muerte. La motivación más grande que he tenido como líder es poder ayudar a las personas, fuera lo que dio la Alcaldía, para eso me eligieron. La motivación también es seguir aportándole a la comunidad lo que más pueda, siempre he pensado que las juntas de acción comunal, la JAL y los grupos organizados podemos trabajar unidos, sin egoísmos ni problemas para sacar adelante nuestro corregimiento de Pance.

María Eugenia, edil del corregimiento de Villacarmelo
La verdad es que nacimos para ser líderes y aunque se tienen cualquier cantidad de tropiezos con algunos moradores de la zona, como en todo, se tiene la satisfacción de los logros. Es grato trabajar en equipo con los compañeros en pro del corregimiento, creo que la mejor manera es concertar con la comunidad y los entes de control cuando hay desavenencias como en cualquier zona, ya sea rural o urbana. Lo más importante es saber llegar a la comunidad de la mejor manera. Nuestra gran motivación será siempre representar nuestro corregimiento.

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