Cali, febrero 28 de 2025. Actualizado: jueves, febrero 27, 2025 21:36
Cali, febrero 28 de 2025. Actualizado: jueves, febrero 27, 2025 21:36
El acceso a la educación superior en Cali enfrenta un obstáculo silencioso, pero determinante: el costo del transporte público.
Con el pasaje del MIO a $3.200, un estudiante que toma dos buses al día gasta alrededor de $192.000 al mes, casi un 12% del salario mínimo.
Para muchos jóvenes, esta cifra representa una barrera real que los aleja de las aulas y los empuja a la deserción académica.
Ante esta problemática, un grupo de jóvenes de la ‘Red Incidir para Existir’ decidió alzar la voz.
Su objetivo es claro: lograr que Cali implemente la tarifa diferencial para estudiantes de educación superior, un derecho contemplado en el Plan Nacional de Desarrollo, pero que aún no se aplica en la ciudad.
La lucha por la tarifa diferencial no es un capricho ni una demanda aislada.
Está respaldada por el Plan Nacional de Desarrollo, que establece que los municipios deben diseñar estrategias para subsidiar el transporte de los estudiantes clasificados en los niveles A, B y C del SISBÉN IV.
Esta política ya fue implementada en ciudades como Bogotá, Medellín, Bucaramanga y en el departamento del Atlántico, donde los estudiantes lograron acceder a pasajes a menor costo.
Sin embargo, en Cali el panorama es distinto.
“Nos preguntamos por qué en otras ciudades ya existe este beneficio y aquí seguimos esperando”, explica Sebastián Maya, miembro de la ‘Red Incidir para Existir’.
“Presentamos la solicitud ante el Concejo, pero hasta ahora no hemos recibido respuesta”.
El desinterés de las autoridades motivó a los jóvenes a tomar acción.
Organizaron recolección de firmas, reuniones con concejales y congresistas, y estrategias de incidencia en redes sociales y medios comunitarios.
Todo con un solo propósito: que el Concejo y la Alcaldía incluyan este beneficio en sus planes de gobierno.
Conscientes de que la presión ciudadana es clave para lograr cambios, la ‘Red Incidir para Existir’ llevó su mensaje directamente a los estudiantes.
“Empezamos recorriendo universidades como Univalle, la Universidad Santiago de Cali y Bellas Artes”, cuenta Henry Montero, otro de los líderes del movimiento.
“Allí explicamos la importancia de la tarifa diferencial y hemos logrado recolectar más de 2.300 firmas. Queremos llegar a 4.000 para que no puedan ignorarnos”.
El 28 de noviembre de 2024, la Red radicó un derecho de petición ante el Concejo de Cali solicitando una respuesta oficial sobre la implementación de la tarifa diferencial.
Sin embargo, hasta la fecha, no han recibido contestación.
Más allá de las gestiones políticas, la Red apuesta por la movilización ciudadana.
“Cada firma suma”, recalcó Montero. “Invitamos a todos los estudiantes y ciudadanos a apoyar esta causa firmando nuestra petición en línea”.
Además, utilizan las redes sociales para ampliar su alcance.
“Queremos que toda Cali se entere de la necesidad de esta tarifa diferencial”, añadió Maya.
Para quienes quieran unirse al movimiento, las redes de la ‘Red Incidir para Existir’ están abiertas.
“Nuestro objetivo es que este beneficio se haga realidad para todos los estudiantes de Cali”, concluye Montero.
Quienes deseen seguir de cerca esta iniciativa y conocer más sobre el trabajo de la ‘Red Incidir para Existir’ pueden encontrarlos en sus redes sociales, como Instagram (@incidirparaexistir ) y Facebook (Incidir para Existir), donde comparten actualizaciones, eventos y formas de participación.
Además, aquellos que quieran sumarse a la causa pueden agregar su firma en el siguiente enlace: https://tarifadiferencialcali.com/.
Si el Concejo de Cali finalmente aprueba la propuesta, la Alcaldía y Metrocali tendrían la responsabilidad de definir su implementación.
“Existen varios mecanismos posibles”, explica Maya.
“Una opción sería crear tarjetas especiales con descuentos para estudiantes registrados en el SISBÉN. También se podría utilizar un sistema de validación digital para asegurar que el beneficio llegue a quienes realmente lo necesitan”.
Sin embargo, los líderes del movimiento dejan claro que su rol es exigir la implementación del derecho, no definir los detalles técnicos.
“No manejamos presupuestos ni tomamos decisiones administrativas”, aclaró Montero.
“Lo que hacemos es exigir que se cumpla lo que ya está contemplado en la ley”.
La tarifa diferencial es solo una de las muchas iniciativas impulsadas por la ‘Red Incidir para Existir’.
Este colectivo de jóvenes desarrolló una agenda ciudadana con siete líneas de acción que abarcan educación, participación política, cultura y derechos humanos.
“Queremos que la voz de la juventud caleña sea escuchada en todos los niveles de decisión”, destacó Carolina Caicedo, otra de las coordinadoras.
“Hemos participado en eventos como la COP y recibido reconocimiento de Naciones Unidas por nuestro trabajo. Nuestro objetivo es que en Cali se tomen en serio las propuestas de los jóvenes”.
En marzo de este año, la Red lanzará una plataforma digital para visibilizar las iniciativas juveniles en Cali y Bogotá.
“Será una herramienta de incidencia política basada en datos reales”, explica Maya.
“Permitirá a los jóvenes compartir sus demandas y propuestas, y servirá como insumo para la toma de decisiones”.
A pesar de los obstáculos, los jóvenes de la ‘Red Incidir para Existir’ siguen firmes en su lucha.
“No nos vamos a rendir”, afirmó Montero. “Seguiremos tocando puertas, recolectando firmas y buscando el apoyo de más sectores hasta que esta tarifa diferencial sea una realidad”.
El mensaje es claro: la educación es un derecho y el transporte es la vía para acceder a ella.
“Queremos que el Concejo y la Alcaldía de Cali dejen de ignorarnos”, concluye Maya.
“No descansaremos hasta que la tarifa diferencial sea aprobada y aplicada”.
Fin de los artículos
Una publicación diaria del Nuevo Diario Occidente S.A. Fundado el 19 de noviembre de 1961
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