Por: Juan David García Semanate
Auditor
Email: dgarcia@sfai.co

En el mundo de los negocios cada vez más globalizado e interconectado, el Control Interno -al transcurrir del tiempo- toma más relevancia para las grandes compañías en el mundo, porque han entendido de que el Control Interno es una herramienta de cumplimiento, que permite el control y el desarrollo óptimo de los objetivos corporativos propuesto a corto y largo plazo, además, de la prevención de fraudes y errores.

Pero, según la premisa anterior, surgen dudas como: ¿Cuáles son los objetivos básicos del Control Interno? y ¿para qué sirve en esencia el Control Interno? Dando respuesta a los interrogantes anteriores, los objetivos básicos se pueden enunciar cómo:

1. Proteger o salvaguardar los recursos de la empresa contra perdidas, fraudes o ineficiencias.
2. Aportar o promover el concepto de “razonabilidad” en los informes contables y financieros.
3. Apoyar y facilitar la medición del cumplimiento de la compañía.
4. Apoyar o contribuir en la interrelación de las políticas empresariales a nivel transversal (contable, financiero y administrativo).

Del segundo numeral, se puede expresar que, la esencia del Control Interno es salvaguardar los recursos de la compañía por medio de políticas y procedimientos estandarizados y probados, para gestionar, disminuir y dar respuesta a los diferentes tipos de riesgos que se enfrenta a diario las compañías, con el fin de que los Stakeholders de la información financiera tomen decisiones con Estados Financieros fiables y de calidad.

Cumplimiento Corporativo

Es importante resaltar que la madurez de una compañía se puede evidenciar por medio del Control Interno, dado que, una empresa madura, son aquellas que sus procesos y políticas empresariales son fuertes mediante el control y cumplimiento, por tanto, la creación de un Control Interno se debe de diseñar, estructurar e implementar desde un enfoque de la cultura del riesgo y del cumplimiento “Corporative Compliance” y que además, dichas políticas y procedimientos, deben ser flexibles para permitir un crecimiento de la compañía, pero sin dejar a un lado, que el Control Interno sea robusto, para así, facilitar el alcance de los objetivos estratégicos y brindar espacios para una planeación basada en la generación de valor empresarial.

A continuación, se ilustra gráficamente cómo el Control Interno debe de contener métodos basados en cumplimiento y en riesgos para la transversalidad y/o interrelación de las políticas y procedimientos generales de la compañía.

Es así como el departamento de Control Interno y la Administración de la Compañía por medio de herramientas tecnológicas como Big Data con datos no estructurados y estructurados, podrían realizar analítica y generar valor en el cumplimiento de las políticas internas o, en su defecto, simular el cambio o la transformación de una política pero siempre basados en datos, y, es aquí, en donde, la captura y tratamiento de los datos pueden permitir la generación de valor y, a su vez, fortalecer y madurar el Control Interno para cumplir los objetivos trazados en la estrategia corporativa.

Para que una empresa en su operación y desarrollo alcance de manera eficiente los objetivos trazados, los empresarios, indistintamente a su tamaño, deben de prestar una mayor atención en la estructuración y ejecución del Control Interno empresarial, dado que, los procesos y políticas lo suficientemente robustas y maduras, serán un medio garante para que los Estados Financieros cumplan su función básica, cual es, la de proporcionar información fiable y de calidad para la toma de decisiones tanto a usuarios externos como internos, lo que permite la generación del confianza en la empresa, sus administradores y dueños, disminuyendo el riesgo patrimonial y de reputación.

En conclusión

La Auditoría Externa e Interna, junto a la analítica científica de la data, permiten evaluar y aportar a madurar procesos internos empresariales, para que dichos procesos, sean lo más eficientes y eficaces a la hora de ejecutar las actividades ordinarias en las compañías y, así, la gerencia general pueda utilizar el tiempo de una manera más estratégica para definir caminos y objetivos con el fin de la generación de valor empresarial, teniendo en cuenta que, el tener un Control Interno basado en compliance y riesgo, ofrecen una mayor confianza en las operaciones.

En SFAI, desde un enfoque global, ¡Generando Confianza!, asistimos en agregar valor con profesionalismo y tecnología a las empresas colombianas, por lo que en medio de la crisis actual que vivimos en Colombia y en el mundo entero, hemos abierto un espacio para atender sus dudas e inquietudes en relación a su negocio; escribanos en www.sfai.co, cinta “CONTÁCTENOS”, nuestros especialistas estarán disponibles a su requerimiento.

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